A BEBER MÁS QUE LOS PECES EN EL RÍO
El mundo de los villancicos es fascinante. Las letras son bastante evocadoras de la cultura donde se ha compuesto la cancioncita navideña y la mayoría de ellas contienen mensajes ocultos y hasta advertencias. Nunca entendí aquello de asomarse a la ventana para ver al Niño en la cuna. Si Jesús nació en un pesebre, no en una rotonda, ¿qué iba a ver yo asomándome a la ventana? Eso valdría cuando los pueblos eran cuatro casas y la vaquería estaba enfrente de dos de ellas. Luego está la Virgen peinándose entre cortina y cortina con un peine de plata fina. Eh, pero si yo creía que la familia humana de Jesús era más pobre que las ratas... O igual estaba yo equivocada y la carpintería de José era realmente un imperio tipo IKEA y daba para palacios con cortinas y bisutería cara. Pero entonces, ¿cómo acabaron durmiendo en un establo? Ah, que no dice en ningún sitio en el Evangelio que era porque no tuvieran dinero para hoteles, sino que era porque estaba todo lleno, y no había a...