Sociedad Protectora del Espacio-Tiempo

Iba a escribir sobre los Gamusinos amarillos con los que soñé ayer, sobre los masters en prensa rosa que se pueden hacer en la espera de la pelu o tan sólo en mis tardes de Semana Santa haciendo recados y estudiando como una posesa…
Pero no, he leído una historia curiosa en una web de noticias variadas (no voy a hacer propaganda pero es muy conocida) y aunque sé que el 1 de abril suele ser el día de los inocentes en Europa, esta historia me ha inquietado y divertido a la vez entre tantas calamidades, muertos y procesiones:
Se trata de la historia del presunto hombre del futuro que ha aparecido en las cercanías del CERN para prevenirnos de la catástrofe que podemos provocar si seguimos con los experimentos del Gran Acelerador de Hadrones, LHC para los amigos.
Tengo un déjà-vu porque creo que ya he hablado del famoso Bosón de Higgs en otra ocasión aquí , pero simplemente la noticia me ha dejado como la famosa película de Denzel Washintong, donde el conocimiento del futuro hace que se cambie ese mismo futuro.
La noticia curiosa habla de un tío, un tal “Mr. Cole” que tenía una máquina para viajar en el tiempo del tipo licuadora y que revolvía en la basura buscando “combustible”. Presuntamente venía del futuro para avisarnos de que dejáramos de usar el LHC o el mundo se destruiría.
Al parecer lo habrían encerrado en un sanatorio mental del que habría desaparecido misteriosamente, no sabemos si con la licuadora o no. Si es cierto que con una licuadora y mondas de manzana es posible viajar al futuro creo que yo ya habría estado en el año 50.000 por lo menos porque con mi asquerosa vida sana pre maternal no hago más que engullir vitaminas y otros compuestos sanos sanísimos y tengo la nevera a reventar de manzanas…
El caso es que este tío claramente miente, porque si nosotros destruimos el mundo, ¿cómo cojones puede venir del futuro si nos lo habríamos cargado todo? Directamente no habría futuro, ¿o no?
O bien lo que ocurre es que por el sólo hecho de habernos visitado desde el futuro ya ha cambiado el futuro .
Hay un montón de películas en las que se juega con la línea del tiempo como si fuera una comedia de enredo, como la que he mencionado antes, la famosa : “Déjà-vu” donde un policía se enamora de una chica que sabe que está muerta pero al viajar al pasado, aunque las cosas se van cumpliendo de forma inexorable, intenta luchar contra el destino fatal para la chica, a la que ha tenido muerta entre sus brazos cuando sólo era una desconocida. La historia en sí es absurda y el final más, pero no voy a contarlo por si alguno no la ha visto todavía.
Pero incluso hay algunas películas más absurdas, como la de “La Casa del Lago”, probablemente la peor peli de Sandra Bullock y Keanu Reeves, pero ya se sabe que entre éxito y éxito, los actores también tienen que comer caliente y no hay más remedio que hacer pelis de serie C (Las de serie B para mi gusto son mejores porque por lo menos te quedas dormido).
Como digo, en algunas películas absurdas se juega con la línea espacio temporal. En las comedias, como la infame saga de Regreso al Futuro, alguien del presente viene en su De Lorean a encontrase con su abuelo en el lejano Far West. En otras pelis dramáticas, dos personas aburridas, sosas y lastimeras acaban concretando un absurdo romance basado en un buzón embrujado o incluso un intrépido mártir viaja al pasado para engendrarle un hijo a la madre de su mejor amigo de la que siempre ha estado enamorado sin conocerla y que resulta que dicho amigo es su hijo que lo tiene que enviar al pasado para que ayude a su madre y … (Terminator).
Como digo, cosas absurdas y culebrones retorcidos se esconden bajo la perversa dominación del espacio-tiempo. Generalmente las historias siguen dos corrientes filósoficas:
1) La fatalista épica griega, en la que cual Edipo ciego que acaba por solazar con su madre sin saberlo, los protagonistas luchan contra un futuro previsto creyendo que pueden burlar los designios de los Dioses. Esto también es típico de algunas películas hechas bajo el signo del luteranismo.
2) La del “todo vale”. En estas dan patadas a la física, a la lógica y a la memoria incluso de los espectadores, pero da igual, el caso es llenar 90 minutos de enredos y cosas absurdas e hilarantes, como el encontrarse uno a sí mismo con treinta años de diferencia para darle consejos sobre cómo ligarse a una chica porque el sujeto adolescente es un frikie pavisoso de mucho cuidado.
El caso es que nadie ha sido demandado en este planeta por violar las reglas de la lógica ni de la física, así que Hollywood sigue encontrando un filón en el desconocimiento crónico de los que consumen películas taquilleras. Por poner un ejemplo: Las explosiones tremendamente sonoras en el vacío del espacio sideral (Todas las pelis famosas incluyendo las del Lucas, las del Mr Spock , etc.).
En fin, está visto que en este planeta te pueden detener por bajarte una canción del Ramoncín pero no por violar las reglas del espacio-tiempo.
Ojalá que alguien viaje al pasado y se cargue el master del “Arañando la ciudad” y demás discos perpetrados por este “perseguidor de gitanas de los malacatones”.