Están locos estos romanos ....
Mientras me arreglaba para salir al teatro, vi en la tele que estaban reponiendo la peli de Asterix y me acordé bien de la frase favorita de Obélix : “Están locos estos romanos”, refiriéndose siempre a las locuras que se les ocurren a los romanos que les llevan a la derrota mientras ellos plácidamente contemplan lo que sucede… O eso parece, claro, ja,ja,ja,ja.
Me he acordado mucho de esta frase toda esta semana, porque han acontecido muchas cosas dentro y fuera de mi microcosmos personal.
A nivel nacional, he presenciado dos escenificaciones del perfecto teatro guiñol en el que se ha convertido ya la “putocracia” gobernante formada por el Desgobierno zapaterista, la corrupta oposición y el falso indicalismo además de los barbazules de la CEOE y los banqueros representativos:
En primer lugar, la parodia de huelga general del día 29, un mero intento de los sindicatos pesebristas de este país de intentar convencer a los trabajadores de que los sindicatos luchan por algo más que no sea lamer la mano del amo que les pasa la mano por el lomo y les da las migajas.
Luego, este finde la pantomima de democracia interna en la cúpula del soviet gobernante.
Si alguien se cree que existe democracia en el seno de los partidos políticos es que todavía cree en los Reyes Magos. Creo que a Trini aparte del gafe de Zapatero, lo que la hundió fue la frase de Esperancita en “ la Noria”: “Trini de candidata a la Comunidad de Madrid es como París Hilton fundando conventos”. Ya dice el refrán que el da primero da dos veces. Así que Cruella de Vil me temo que seguirá haciendo de las suyas porque ha conseguido quedarse nuevamente sin sombra…
Pasando a nivel doméstico, no voy a entrar en detalles para explicar cómo es mi familia: Baste decir que el sábado decidí que mi familia también va a entrar en el programa de reciclaje de mi vida social, pues cada vez tengo menos tiempo y menos ganas de esforzarme por quienes no ya que no me ayuden, que sería mucho pedir que se preocuparan por mis problemas, pero es que ni siquiera se esfuerzan un poquito por hacerme la vida agradable ni cuando voy de visita.
La vida va cambiando. Yo de jovencita me esforzaba más por mantener amistadas, y es que con quince años te afanas en hacer amigos, a pesar de que es una época inestable y las chicas son malas y pérfidas incluso con las propias amigas. Los chicos son brutos e insensibles. Toleras ciertas cosas por la falsa identidad de grupo y de camaradería, etc, etc. Y también porque si vas a ligar sola o te toman por una fulana o no te comes una rosca.
Pero ya a mis cuarenta y pico años, la verdad es que cada vez me queda menos tiempo y menos paciencia para dedicarla a gente que no merece la pena. Así que he decidido que voy a ir cada vez menos por casa de mis padres y, lo que es más, ya que me van a tratar a patadas tanto si hago favores como si no (visto lo visto del sábado), pues me sale más rentable pasar de mi familia totalmente.
Vale, la conciencia bobalicona igual me sigue jugando alguna mala pasada, pero no, a mi edad es mejor dejarla en casa, como la vergüenza y el Wonderbra, ya que enseguida aprendes que ninguna de las tres cosas te va a servir de ayuda.
Estoy ya muy cansada de todo, sobre todo de trabajar un montón para que otros se lleven el éxito y el dinero. Pues igual estoy harta de hacer favores a quien no los aprecia, aunque esas personas compartan un tanto por ciento de mis genes.
A fin de cuentas, si de algo me ha servido pasar por una clínica de fertilidad, es para darme cuenta de que cada vez la genética tiene que ver menos con las relaciones humanas, y aún menos con construir familias.
Hay padres que tienen hijos que son de donante tanto de óvulos como de esperma e incluso se lo puede haber gestado una madre de alquiler y al final acaban hablando tagalo como la niñera.
Total que lo único que comparten con los padres es el apellido y la insignia de la misma universidad pija, pero sus padres están muy orgullosos de su hijo y viceversa.
Y luego hay padres que, desde que naces, eres un estorbo o un arma de venganza contra su frustración, como el pobre bebito calcinado este fin de semana por un padre inyectado en puro odio. ¿Cómo se puede cometer algo tan atroz contra la carne de tu carne? Pero es así, hay padres y hermanos con complejo de Saturno, devorando a sus propios hijos/hermanos por pura envidia y odio.
En fin, me callo porque se me subleva la sangre sólo de pensarlo y esto es malo para la ovulación.
Es más, me da igual que me lean el blog (sé que lo hacen) y que digan que soy una falsa y una embustera, porque por suerte hay gente que me conoce desde los tres añitos y sabe de la cantidad de zancadillas que mi propia familia me ha puesto ….
Bueno, pero no todo ha sido mal en este finde, es más, yo diría que lo único malo ha sido el rato de la encerrona en casa de mis padres con mi hermana pequeña con el morro torcido.
Por ejemplo este viernes noche estuve en un curso de iniciación de cata de vinos y me lo pasé estupendamente bien, lo más divertido yo creo no fue el olfatear y degustar copas de vino, sino la pisada virtual de uva o el simulador del carro de vendimia.
Fue bastante pachanguero, a diferencia de la cata profesional a la que asistí en febrero, que ahí iba gente con mucho nivel…
Aquí por de pronto nos dieron un mandil y un sombrero, para sentirnos un poco como en Falcon Crest, ahí con los viñedos por delante. Menos mal que de las avispas no tenían simulador, porque recuerdo hace ya veinte años en el pueblo de una amiga en Zamora que si no me acribillaron es porque les debí de dar pena.
Como si estuviéramos en una excursión del cole, nos dieron a oler esencias básicas y a ver si adivinábamos lo que era. Yo tengo muy buena nariz, sobre todo desde que leí “El perfume” de Patrick Süskind, pero aquello superaba todo. Hay olores básicos del vino como a manzana verde, a fresa, a mora, a madera, a cuero, pero luego hay otros increíbles como a acacia,a mantequilla o incluso a incienso.
Recuerdo en febrero que me miraron todos atónicos cuando, en la cata de un vino de jerez, dije que me sabía regusto a incienso. Pues resultó que aquel vino… Procedía de un convento y había estado escondido bajo una capilla!!!
Por unos minutos, me sentí como una vedette de un anuncio navideño de cava, que es una lástima que con la crisis lo hayan quitado, porque era lo único genuino y setentero que quedaba de la Navidad…
También este finde me lo pasé muy bien en la obra de teatro de un ex compi mío del curro. Se trata de un grupo de amateurs que representan obras musicales adaptadas de grandes éxitos en USA.
Pude comprobar que este chico, a pesar de su nuevo trabajo tan serio y formal, no había perdido un ápice de esa vena artística que lo mueve a pintarse la cara todos los años y salir en coro cantando y bailando.
Sorprende ver como un grupo de chicos con tan pocos medios consiguen más que los mejores musicales de cantantes famosos que lo único original que tienen es el nombre del grupo.
Estos chicos son savia nueva, y creo que seguiré yendo a verles cada año, aunque acabe con tortícolis por lo rígido de los viejos asientos del salón de actos del colegio donde actúan.
En fin, lo dicho, están locos estos romanos!!!!!
Me he acordado mucho de esta frase toda esta semana, porque han acontecido muchas cosas dentro y fuera de mi microcosmos personal.
A nivel nacional, he presenciado dos escenificaciones del perfecto teatro guiñol en el que se ha convertido ya la “putocracia” gobernante formada por el Desgobierno zapaterista, la corrupta oposición y el falso indicalismo además de los barbazules de la CEOE y los banqueros representativos:
En primer lugar, la parodia de huelga general del día 29, un mero intento de los sindicatos pesebristas de este país de intentar convencer a los trabajadores de que los sindicatos luchan por algo más que no sea lamer la mano del amo que les pasa la mano por el lomo y les da las migajas.
Luego, este finde la pantomima de democracia interna en la cúpula del soviet gobernante.
Si alguien se cree que existe democracia en el seno de los partidos políticos es que todavía cree en los Reyes Magos. Creo que a Trini aparte del gafe de Zapatero, lo que la hundió fue la frase de Esperancita en “ la Noria”: “Trini de candidata a la Comunidad de Madrid es como París Hilton fundando conventos”. Ya dice el refrán que el da primero da dos veces. Así que Cruella de Vil me temo que seguirá haciendo de las suyas porque ha conseguido quedarse nuevamente sin sombra…
Pasando a nivel doméstico, no voy a entrar en detalles para explicar cómo es mi familia: Baste decir que el sábado decidí que mi familia también va a entrar en el programa de reciclaje de mi vida social, pues cada vez tengo menos tiempo y menos ganas de esforzarme por quienes no ya que no me ayuden, que sería mucho pedir que se preocuparan por mis problemas, pero es que ni siquiera se esfuerzan un poquito por hacerme la vida agradable ni cuando voy de visita.
La vida va cambiando. Yo de jovencita me esforzaba más por mantener amistadas, y es que con quince años te afanas en hacer amigos, a pesar de que es una época inestable y las chicas son malas y pérfidas incluso con las propias amigas. Los chicos son brutos e insensibles. Toleras ciertas cosas por la falsa identidad de grupo y de camaradería, etc, etc. Y también porque si vas a ligar sola o te toman por una fulana o no te comes una rosca.
Pero ya a mis cuarenta y pico años, la verdad es que cada vez me queda menos tiempo y menos paciencia para dedicarla a gente que no merece la pena. Así que he decidido que voy a ir cada vez menos por casa de mis padres y, lo que es más, ya que me van a tratar a patadas tanto si hago favores como si no (visto lo visto del sábado), pues me sale más rentable pasar de mi familia totalmente.
Vale, la conciencia bobalicona igual me sigue jugando alguna mala pasada, pero no, a mi edad es mejor dejarla en casa, como la vergüenza y el Wonderbra, ya que enseguida aprendes que ninguna de las tres cosas te va a servir de ayuda.
Estoy ya muy cansada de todo, sobre todo de trabajar un montón para que otros se lleven el éxito y el dinero. Pues igual estoy harta de hacer favores a quien no los aprecia, aunque esas personas compartan un tanto por ciento de mis genes.
A fin de cuentas, si de algo me ha servido pasar por una clínica de fertilidad, es para darme cuenta de que cada vez la genética tiene que ver menos con las relaciones humanas, y aún menos con construir familias.
Hay padres que tienen hijos que son de donante tanto de óvulos como de esperma e incluso se lo puede haber gestado una madre de alquiler y al final acaban hablando tagalo como la niñera.
Total que lo único que comparten con los padres es el apellido y la insignia de la misma universidad pija, pero sus padres están muy orgullosos de su hijo y viceversa.
Y luego hay padres que, desde que naces, eres un estorbo o un arma de venganza contra su frustración, como el pobre bebito calcinado este fin de semana por un padre inyectado en puro odio. ¿Cómo se puede cometer algo tan atroz contra la carne de tu carne? Pero es así, hay padres y hermanos con complejo de Saturno, devorando a sus propios hijos/hermanos por pura envidia y odio.
En fin, me callo porque se me subleva la sangre sólo de pensarlo y esto es malo para la ovulación.
Es más, me da igual que me lean el blog (sé que lo hacen) y que digan que soy una falsa y una embustera, porque por suerte hay gente que me conoce desde los tres añitos y sabe de la cantidad de zancadillas que mi propia familia me ha puesto ….
Bueno, pero no todo ha sido mal en este finde, es más, yo diría que lo único malo ha sido el rato de la encerrona en casa de mis padres con mi hermana pequeña con el morro torcido.
Por ejemplo este viernes noche estuve en un curso de iniciación de cata de vinos y me lo pasé estupendamente bien, lo más divertido yo creo no fue el olfatear y degustar copas de vino, sino la pisada virtual de uva o el simulador del carro de vendimia.
Fue bastante pachanguero, a diferencia de la cata profesional a la que asistí en febrero, que ahí iba gente con mucho nivel…
Aquí por de pronto nos dieron un mandil y un sombrero, para sentirnos un poco como en Falcon Crest, ahí con los viñedos por delante. Menos mal que de las avispas no tenían simulador, porque recuerdo hace ya veinte años en el pueblo de una amiga en Zamora que si no me acribillaron es porque les debí de dar pena.
Como si estuviéramos en una excursión del cole, nos dieron a oler esencias básicas y a ver si adivinábamos lo que era. Yo tengo muy buena nariz, sobre todo desde que leí “El perfume” de Patrick Süskind, pero aquello superaba todo. Hay olores básicos del vino como a manzana verde, a fresa, a mora, a madera, a cuero, pero luego hay otros increíbles como a acacia,a mantequilla o incluso a incienso.
Recuerdo en febrero que me miraron todos atónicos cuando, en la cata de un vino de jerez, dije que me sabía regusto a incienso. Pues resultó que aquel vino… Procedía de un convento y había estado escondido bajo una capilla!!!
Por unos minutos, me sentí como una vedette de un anuncio navideño de cava, que es una lástima que con la crisis lo hayan quitado, porque era lo único genuino y setentero que quedaba de la Navidad…
También este finde me lo pasé muy bien en la obra de teatro de un ex compi mío del curro. Se trata de un grupo de amateurs que representan obras musicales adaptadas de grandes éxitos en USA.
Pude comprobar que este chico, a pesar de su nuevo trabajo tan serio y formal, no había perdido un ápice de esa vena artística que lo mueve a pintarse la cara todos los años y salir en coro cantando y bailando.
Sorprende ver como un grupo de chicos con tan pocos medios consiguen más que los mejores musicales de cantantes famosos que lo único original que tienen es el nombre del grupo.
Estos chicos son savia nueva, y creo que seguiré yendo a verles cada año, aunque acabe con tortícolis por lo rígido de los viejos asientos del salón de actos del colegio donde actúan.
En fin, lo dicho, están locos estos romanos!!!!!
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