DEFCON 2 a 3 días de la boda

DEFCON 2: -3 días para Día D.

Me faltan tres días para la boda. Ahora ya estamos cerrando temas pendientes y, particularmente, tengo tareas para rato y estoy reventada. Me agobia pensar que se me olvidan cosas importantes, aunque no creo que sea así.

También me rondan los y si… E intento calcular cuál será el plan B pero es difícil. Por ejemplo: ¿Y si no me arranca el coche el sábado por la mañana y no llego a tiempo a hacer las gestiones adecuadas? ¿Un taxi? Sí, pero, ¿cargada con el vestido y un montón de bultos? Y como tengo que pasar antes por la iglesia, ¿dónde meto esos bultos y cómo iría luego al hotel donde voy a quedar con la peluquera, las amigas que me ayudarán a vestirme y los fotógrafos?

¿Y si en el hotel han perdido mi reserva? Eso mejor reconfirmar el viernes, aunque parezca muy cansina, supongo que lo entenderán. Eso y preguntarles cómo carajo se entra a su parking que en el Google Maps desaparece la carretera sin más explicaciones…

¿Y si la peluquera no puede venir? ¿Qué haría entonces? Supongo que pedirle a alguien que traiga unas tenacillas de peinar y me ayude, porque contratar a otra a estas alturas sería imposible. Así que por si acaso me llevaré yo un kit de horquillas y accesorios de peinado redundantes (cepillos, laca, etc.)

Lo del maquillaje me preocupa menos porque por si acaso siempre llevo yo cosas necesarias, y tengo buena mano. Me tomaré una tilita para no hacerme rayajos y acabar pareciendo un mapache…

Pero todavía hay más “ y sis”… Como que qué pasaría si me caigo y me rompo el vestido o peor, una pierna, o cosas por el estilo. Luego está el “y si pasa algo de camino y no llegamos a la iglesia”. Ahí ya me supera. Prefiero no pensarlo. Sin embargo, O está muy tranquilo. Pero.. ¿Y si a última hora le entra un ataque agudo de “diarrea mental” y se queda en casa? Lo mataría a buen seguro pero el mal estaría hecho…

Prefiero no pensar en los “ysis” y pensar en que todo irá bien. Esto es como el examen de la Selectividad, que cuanta más importancia le des, peor te saldrá.

Luego además, estoy con un ataque de alergia o trancazo (prefiero no pensarlo) y me han vuelto a salir ronchas en la cara (porque no encontré hueco para volver al dermatólogo, como me aconsejó).

Sé que es pasajero y que lo que peor debo hacer es preocuparme. Total, lo importante es la ceremonia e intentar no llegar hecha un monstruo, pero da grimita tirarse tanto tiempo preparándolo todo para que luego se desbarate por cualquier contratiempo. En informática lo llamamos “efecto demo” que es que todo funciona bien en el laboratorio hasta que llega el día de presentar los resultados a la dirección, día que se estropea el PC, el proyector, se rompe una tubería de la sala de presentaciones o te caduca la clave del PC y no puedes entrar…