CONSPIRANOIA PRIMERA PARTE

LA ISLA

Estoy aquí en el trabajo esta mañana como Johnnie Castaway, el famoso naúfrado del salvapantallas que se hizo famoso allá por los años 90 y al que tuvieron el honor de dedicarle una peli y todo. Yo me acuerdo todavía emocionada, que dejé sin tocar mi PC diez días seguidos con sus noches para poder captar emocionada el momento en que el barbudo naúfrago era rescatado y se iba del brazo de su Sirena…

Aquí en el trabajo es más o menos lo mismo. La diferencia es que no veo el Sol, bueno, aunque estuviera cuatro plantas más arriba tampoco, está lloviendo creo… Por aquí no queda nadie con mando y plaza, creo que si hubiera algún desastre sería la persona de mayor grado y edad en todo el edificio… Por aquí en mi bunker tengo a unos metros un mocetón venido de los Balcanes que está colaborando en un proyecto, no sé, igual está aquí para analizar nuestras costumbres, al igual que el camarada Borat…

Ayer también pasé toda la tarde en casa, como en otra isla, pero con vistas a un parque al menos y con mejor decoración. El motivo es que la jaqueca me tiene consumida estos días, bueno, la jaqueca, las espinillas por la falta de oxigenación y exceso de hormonas (el Síndrome, ya sabéis), y también porque un maldito accidente en la cocina me ha proporcionado unas ampollitas que intento disimular malamente con pasta de dientes y maquillaje, pero nada, el efecto no se acaba de conseguir, y a buen seguro que se me acabarán infectando y me tendrán que hacer un transplante de cara…Bueno, así podré infiltrarme en casa de mis padres a ver si siguen hablando mal de mí, que llevo sin hablarme con la familia cuatro días y ni me han mandado un sms los muy pueñeteros… Como decía el chavalín de “Aquí no hay quien viva” cada día va bajando el caché del geriátrico al que les voy a meter dentro de poco como sigan tan impresentables conmigo…

Ayer, sin embargo, y a pesar de estar en una isla, tuve largas conversaciones. Una fue con Morfeo, por la mañana, tras doparme con el Ibuprofeno a dosis casi letales, y la otra con un nuevo amigo por el Chat, con el que estuve explayando mi conspiranoia, que ya le dedicaré unos capítulos enteros cuando me reponga más de la jaqueca. Sólo adelantaré que la conspiranoia es un término acuñado por los líderes del mundo occidental, oriental y central, líderes son todos los mismos, para calificar a la gente inconformista que no se traga los cuentos chinos o musulmanes que nos cuentan para explicarlos las razones de algunos sucesos dramáticos de los últimos años. Sólo por un ejemplo y de acuerdo con el amigo Thierry Meyssan (La Gran Impostura), no se lo cree ni un niño de tres años que el Mohamed Atta se estrellase con el avión contra un edificio y ni la uña del meñique queda sin carbonizar, y luego aparezca su pasaporte intacto, oigan, esto es un milagro y no el de los panes y los peces!!! Bueno, en esta línea estuve hablando con mi nuevo amigo y contándole mis ideas sobre muchas cosas y sucesos. Y así se nos hizo la hora de cenar y de ver la tele, en este caso no pude por menos de sucumbir a ver el último capítulo del “Triángulo de las Bermudas” pero la verdad que el final me dejó un poco fría, quizás porque había demasiada agua y demasiadas olas, que los personajes recibieron más agua que yo una noche hace varias semanas que me pilló una tromba y llegué calada hasta las braguitas…

En fin, volviendo al tema de la Isla y la Conspiranoia, me estoy acordando de un film un pelín sosillo pero bien llevado que, para los que somos un pelín viejecitos, nos recordaba en seguida al soberbio “La fuga de Logan”. Resumiendo: Que a la gente la engañaban como bobos menos dos que no se creen las patrañas de los demás y huyen para escapar de una certera muerte (el resto son como borreguitos en el matadero). Yo creo que Hawking que sabe algo y es más listo de lo que nos hace creer con su divulgación para el Mass Media, ya está planificando como teletransportarse a Marte a lo Star Trek y de hecho, el agua que han descubierto, es que ha empezado ya a llenarse la piscina de su nuevo chalet… Uy, si el pobre no puede nadar, ¿o sí? Lo malo es que Marte es un sitio todavía no bien conocido y un pelín inhóspito, por eso habría que crear una atmósfera artificial, como en la película “Desafío Total”, que por cierto ya añado que está mal traducida, ya que el título original es “Total Recall” y juegan con los dos significados de Recall: Recuerdo o Desafío. Tal y como está planteada la película lo de Desafío no lo veo por ningún lado. Yo lo hubiera titulado: Recuerdos auténticos, o “Todo en la Memoria”, no sé, algo más acorde, desde luego…

Bueno, desvariando un poco, hay que ir empezando a pensar cómo llegar a Marte, cómo aclimatarse al frío y al dióxido de carbono y cómo librarse de la especulación urbanística, esto último es lo que veo más difícil de conseguir.

En fin, amigos, os dejo, que voy a ver si le pongo un lacito rosa (uy, rosa no que les va a parecer muy gay a mis jefes, ya se sabe…), mejor les pongo un lacito púrpura y se lo empaqueto para que el lunes puedan leerlo con los donuts tranquilamente.

Me voy a comer algo, si es que queda algo de comida por aquí que no sea mutante o se lo lleven a hombros los parásitos…

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