El milagro antigrasa

Ya me estoy recuperando de la punción de ovarios de la semana pasada y de la transferencia del viernes pasado. Además, si el jueves tenía la tripa que parecía un barril doloroso e hinchado, hoy parece que jamás me hayan hurgado las tripas. Creo que es desde que me empecé a pinchar la heparina para disolver trombos del abdomen y prevenir los del útero, pero yo creo que lo que me estoy pinchando es Fairy antigrasa, porque me ha dejado la tripilla planita y he bajado más de un kilo en dos días, y mira que estar vagueando e hincharme a puré de lentejas no me parece muy adelgazante. Ahora que ya estoy mejor y han pasado casi dos días de reposo casi absoluto, me toca la fase de reposo relativo, en la que como dije, puedo viajar incluso, pero no hacer esfuerzos, sumergirme en baños o tener relaciones. Nos hemos decidido por Málaga porque es una ciudad que tiene algo más que sol y playa, y dado que queremos buen tiempo, solecito pero no podemos ir a la playa a remojarnos, al menos tener opciones de turismo. Además, tengo allí un primo que se casó con una malagueña y le debemos una visita. Para mí Málaga es una ciudad entrañable. Si Benidorm es mi sitio de marcha veraniega favorito, si tuviera que elegir un sitio para vivir sería Málaga. Tiene una infraestructura adecuada de ciudad, pero el paisaje, el clima y los lugareños son muy agradables. Eso por no hablar de la gastronomía. Me relamo de gusto con sólo pensar en los boqueroncitos de los sitios de tapas de la calle Larios (puedo mencionar nombres, pero quiero hacer publicidad, si quieren que la hagan, que me paguen primero, je,je,je.). Además de la ciudad, la provincia entera es una joya y tengo recuerdos entrañables. Recuerdo un año montando en burro en Mijas, otro yendo a las fiestas de la Elviría (una zona de costa cerca de Marbella), también recuerdo un fin de semana haciendo de “mami” improvisada de unas chicas rusas atolondradas en Puerto Banús y recuerdo también el Lamborghini que me enseñó cómo funcionaba un famoso de origen inglés por la zona del puerto (no voy a decir quién). Ronda me parece un pueblo fascinante, si tengo ocasión le llevaré allí a O. Como digo, hay mucho que ver allí sin necesidad de salir de copeo. Se puede hacer visitas interesantes y no muy extenuantes por lo que creo que nos vendrá bien irnos de mini vacaciones. Ya sólo falta saber cómo iremos allí, porque por desgracia mañana hay huelga de Renfe y el martes está todo pillado y muy caro. Veremos a ver qué hacemos y cómo vamos hasta allí. El coche es lo más barato en teoría pero aparcar en el centro de Málaga es inviable. Si no escribo en varios días, es porque estaré por allí dando aire fresco a mis trillizos. Ayer les di una sesión de cuenco tibetano, a ver si así se animan a seguir dividiéndose y agarrándose al útero.