Mars One

Para no hablar tanto de mí en primera persona, me gustaría comentar algunas cosas curiosas de las que he tenido noticia recientemente.

La cosa más loca que he leído es el proyecto Mars One. Para los que no sepáis de qué va, se trata de enviar una expedición de ida pero sin vuelta a Marte.

Dicho así parece una total locura. Bueno, y lo es, aunque tratan de disfrazarlo de proyecto científico, en efecto es una locura de remate. ¿Por qué? Ahora os lo cuento.

Lo primero es que no está la NASA detrás. Que digo yo, es cómo ir a bombardear sin aviones. Pero aún más loca es la cosa:

Detrás de todo esto no hay un colectivo científico. Hay científicos, vale sí, pero no un colectivo acreditado y reglamentado como tal. Lo segundo, que lo patrocina una productora de televisión que quiere montar un reality show a lo Gran Hermano, pero como ya no tienen bastante con la Isla Tortuguera, quieren liarla parda en las Arenas de Marte.

A mí dicho sea de paso, me gustó mucho la película original "Total Recall" mal traducida por Desafío Total, que narra la experiencia virtual de un obrero frustrado que sueña con ir a Marte, convertirse en una especie de 007 de allí  y liarse con una exótica marciana.

Como película, la fantasía marciana me parece buenísima. Yo también de pequeña soñaba con vivir en otro planeta (ya vivía virtualmente en otros mundos) y devoraba las novelas bodriosas de Clarke sobre hipotécicos planetas lejanísmos de extraterrestres que, mira por donde, se parecen mucho a los terrícolas y hasta echan pinchitos con ellos. 

Con 15 años no medía mucho lo bizarro de todo aquello. 30 años después me he vuelto una descreída total e igual que pienso que 50 Sombras de Grey es una parodia sosíma hasta la naúsea de la depravadísima Justín del Marqués de Sade, pienso que hay demasiada tontería con el tema marcianos.

 Si ya Interespacial me hizo troncharme por la idea tan tonta sobre los agujeros de gusano (Como venga un alienígena de verdad nos va a dar con una vara a todos por imbéciles), igual la idea de ir a Marte a vivir en plan colono Mayflower me hace troncharme aún más.

Lo peor de todo ya no es que el proyecto sea bodrioso e inviable. Es que encima hay gente que se mata por ir.

Repanochante. A las colonias de Estados Unidos y, sobre todo, a Australia no iban más que presidiarios y aristócratas arruinados que querían poner tierra de por medio para no tener que pegarse un tiro. Un, de perdidos al río, vaya. 

Pero aquí no. Cualquier mente normal se daría cuenta de que, en el improbable caso de que una nave lleve gente hasta allí sin sufrir ni un rasguño, el habitat es muy hostil, no se podría llevar de todo lo necesario para vivir, como comida y agua para unos 40 años de vida promedio y, lo peor, no hay Internet y probablemente, sea muy difícil mantener una conexión permanente.

Lo más probable es que la gente que llegue allí muera en pocas semanas. Como mucho, que duren un par de años. Y aún así se han presentado 200.000 personas, de las que finalmente han escogido 100, con no sé qué extraño criterio.

Pero estos tíos de Mars One ya han empezado a pedir dinero vía Crowdfunding. A mí esto me huele a timo como un piano. Tampoco sé si los candidatos han pagado algo, pero seguro que se han gastado dinero en ir hasta Holanda o donde sea. Vaya, un rollo patatero y cada año que pasa retrasan cada vez más el lanzamiento. Antes era el 2018 y ahora ya van diciendo que para el 2024. Si alguna vez realmente consiguen hacer viable técnicamente el proyecto, los 100 seleccionados tendrán 80 años y entonces no estarán ni para hacer un viaje a Cuenca con el Imserso.

Ya sé que Marte no es de nadie. Y la Luna tampoco aunque tenga una banderita con barras y estrellas clavada en el mar de la tranquilidad.

Pero, por higiene mental y para que la gente no me pregunte eso de, ¿y tú tan aventurera por qué no te has apuntado ya para lo de ir a Marte? (me lo han preguntado ya veinte veces :D) por favor, NASA, ESA o quién narices tenga autoridad para esto, por favor, corten ya esta patochada y eviten que el timo se siga extinguiendo, que la Luna está muchísimo mucho más cerca, igual de árida y sigue ahí tan sóla allá en lo alto